Mexicali.- Cuatro meses después de que Saúl N. fuera denunciado por la agresión sexual de una menor en el restaurante Tacos El Cali, el presunto agresor no solo sigue libre, sino que ahora se promueve como candidato al Congreso de Estados Unidos. Mientras tanto, la Fiscalía General del Estado de Baja California (FGE) continúa sin ofrecer resultados concretos en una investigación que, desde el inicio, ha estado marcada por omisiones, dilación y una evidente falta de voluntad.
La página www.votesaul.com/meet_saul muestra a Saúl N. impulsando una campaña política basada en valores como “unidad y libertad”, los mismos que le han sido negados a la víctima y a su familia desde que el caso fue reportado el 21 de febrero de 2025.
Ese día, Hannah, de 16 años, logró enviar un mensaje a su madre desde el interior del establecimiento, alertando que el hombre que la había contratado intentaba llevarla a la fuerza.
La madre llegó al lugar y encontró a su hija llorando, con el agresor aún afuera del local. Policías municipales arribaron, pero no lo detuvieron, pese a estar en flagrancia. Según la versión oficial, no podían ingresar al inmueble sin orden judicial.
Este tipo de omisiones, incluso costaron la remoción del entonces director de policía municipal Luis Felipe Chan, a la fecha la investigación en sindicatura municipal se concentra en seis agentes que intervinieron el día de los hechos.
La oportunidad de detener al responsable fue evidente. La menor lo señaló directamente, pidió que entraran por su celular, donde supuestamente la había grabado. Sin embargo, la Policía optó por la pasividad, y la Fiscalía, en lugar de actuar con urgencia, permitió que Saúl desapareciera.
Desde entonces, la FGE ha declarado que mantiene una “investigación en curso” y que “colabora con autoridades de Estados Unidos”. Pero la realidad es que Saúl N. ha estado activo en redes sociales. El 17 de junio, la cuenta @vote4saul en X (antes Twitter) publicó una imagen de campaña.
Todo esto ha ocurrido ante la inacción total de la Fiscalía, que ha sido incapaz siquiera de confirmar si existe una orden de aprehensión internacional o si se ha activado algún mecanismo de cooperación judicial para su detención.
Mientras Saúl N. se promueve como político en el extranjero, la víctima y su familia continúan esperando justicia. La madre de Hannah ha señalado que recibió información de que el agresor está en Phoenix, Arizona, donde vive parte de su familia. También reveló que la Fiscalía le informó que había cruzado a EE.UU. pocos días después del ataque.
Hoy, el presunto violador no solo está libre: está haciendo campaña, por la negligencia —o indiferencia— de quienes debieron proteger a una menor y aplicar la ley.
Liliana, madre de la menor víctima, confirmo que fue el martes cuando descubrieron las intenciones políticas del agresor, de inmediato la FGE se puso en contacto con ella, abordando el tema con especial secrecía.
