Mexicali.- En lo que va del año, 18 personas han perdido la vida en Baja California a causa de la rickettsia, enfermedad transmitida principalmente por la mordedura de garrapatas infectadas, informó la Secretaría de Salud estatal.
Aunque en sus inicios —alrededor del año 2010— la propagación de esta enfermedad se concentró en zonas calurosas como Los Santorales en Mexicali, y se creía que las altas temperaturas eran un factor clave, esta teoría ha sido descartada.
Municipios como Tijuana, donde las temperaturas son considerablemente más bajas, han reportado un incremento significativo en los contagios y muertes.
De hecho, Tijuana concentra la mayoría de las defunciones en 2025, con un total de 12 víctimas mortales.
La propagación se ha concentrado en la zona este de ese municipio y se ha extendido a zonas colindantes, especialmente hacia el oeste de Tecate.
De acuerdo con la autoridad sanitaria, el aumento de contagios está relacionado con la vulnerabilidad social, como la falta de servicios públicos en estas regiones, y el crecimiento de la población de perros callejeros, quienes actúan como portadores del parásito.
“Somos animalistas, pero siempre vamos a preferir salvar la vida de un niño que la de un perro”, declaró el secretario de Salud en Baja California, Adrián Medina Amarillas, al justificar las acciones de control sanitario emprendidas por la dependencia.
Entre las medidas de contención se encuentran jornadas permanentes de fumigación y la implementación de programas de bienestar animal, con el objetivo de reducir la población de animales en situación de calle y frenar la propagación del parásito.
La Secretaría de Salud exhortó a la ciudadanía a mantener a sus mascotas limpias, revisar su piel constantemente y evitar que transiten libremente por la vía pública.